La Sala Penal del Tribunal Supremo ha confirmado la condena de un año y medio de cárcel que la Audiencia Nacional impuso a un tuitero que humilló a Pilar Manjón, madre de una víctima del 11-M, a través de las redes sociales. Tomas Santos Martín tendrá que indemnizar a Manjón, expresidenta de la asociación 11-M Afectados del Terrorismo, con 6.000 euros.
La sentencia de la Audiencia Nacional ahora confirmada consideró probado que en mayo de 2014, Santos Martín, desde el perfil de Twiter «Arriba España» del que era administrador y que contaba con más de 6.000 seguidores, «a sabiendas de que con ello ofendía gravemente y ocasionaba una pública humillación»a Pilar Manjón en su condición de madre de víctima del terrorismo, difundió los siguientes mensajes: «A Pilar Manjón le tocó la lotería cuando reventaron al hijo. Menuda puta». «Imagino que el padre del hijo de la Manjón no dice nada porque no se sabe quién es....». «Me alegra saber que pese a tu problema ortográfico apoyas a la puta prototerrorista de Manjón».
El condenado recurrió al Supremo contra la sentencia de la Audiencia Nacional alegando que no había quedado demostrado que él fuese el autor de los mensajes enviados desde distintas cuentas. La Sala asegura que la vinculación que realizó la Audiencia entre esas cuentas y el condenado se ajusta a las «reglas de la lógica».
Incuestionable menosprecio
Explica que los primeros datos indiciarios que vinculan los perfiles que utilizaba el acusado procedían de las manifestaciones y convicción de usuarios de la red, que en unos casos eran seguidores y en otros detractores de Santos Martín. Además, el recurrente tampoco reaccionó, dice el Supremo, contra las personas que le atribuían estar detrás de esos perfiles, una identificación que incluso se llevó a cabo en un programa televisivo.En lo que atañe al contenido humillante y vejatorio de las frases publicadas por el acusado con respecto a Pilar Manjón, la Sala explica que él mismo y su defensa admitieron en el juicio que albergaban un contenido de incuestionable menosprecio y humillación para una persona que ha sufrido de forma muy directa los efectos del terrorismo a través del atentado perpetrado en Madrid el 11 de marzo de 2004 contra la vida de su hijo.
La misma sentencia de la Audiencia Nacional condenó también a Fernando de Reyna de los Rios a un año de prisión por publicar en Twiter el comentario «¿Qué se puede esperar de una mala madre que hace negocio apoyando la impunidad de los asesinos de su hijo?». Reyna fue condenado a pagar a Manjón 3.000 euros de indemnización.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario